Uno de los escritores norteamericanos que más consiguió despuntar a lo largo de todo el siglo XX fue Glenway Wescott (1901 – 1987). Y es que alcanzó gran fama como narrador, llegando incluso a ser presidente del Instituto Nacional de las Artes y las Letras.
Como poeta o ensayista consiguió una gran repercusión pero, sin dudarlo, fue como novelista como logró el gran prestigio nacional e internacional que tenía y tiene.
¿Has leído alguna de sus novelas? ¿No? A continuación te damos a conocer algunas de las más importantes que realizó con su pluma:
Las abuelas
1927 fue el año en el que se publicó esta narración, que está considerada como la mejor de toda su carrera. En ella realiza un recorrido exhaustivo por la historia de Estados Unidos. En concreto, lo hace a través de las distintas generaciones de una humilde familia rural de Wisconsin.
Humor, elegancia y grandes dosis de ironía son así los elementos que utiliza el autor para darle forma a la obra, que descubrimos que tiene unos personajes muy atractivos. Y es que todos y cada uno de los miembros de la citada familia tienen algo que ocultar y mantienen en secreto al resto.
El halcón peregrino
Otra de las novelas cumbre en la bibliografía de Glenway Wescott es esta, publicada en el año 1940, que transcurre a finales del verano de la década de los años 20.
En ese momento es donde arranca la historia, que nos presenta en primer lugar a Alexandra Henry. Ella es una joven heredera norteamericana que vive en una casa en la campiña francesa y que, por distintas circunstancias, apostará por cobijar en su hogar a un compatriota llamado Alwyn Tower.
Ese será el principio de una relación, que transcurre en una tarde y que servirá para poner sobre la mesa una gran variedad de situaciones latentes en la sociedad de aquel momento. Nos estamos refiriendo a matrimonios totalmente enfrentados que siguen unidos por “el que dirán”, aristócratas aburridos, gente con dinero que hace cualquier cosa por seguir haciéndolo crecer, ciudadanos sin ningún tipo de normas morales…
Apartamento en Atenas
1945 fue, por su parte, el año en el que vio la luz esta otra novela del autor que nos ocupa, que se ha convertido en una de las más insignes de su carrera. La Segunda Guerra Mundial y el nazismo son los dos ejes centrales de la narración.
Ambos elementos se plantean a través de la figura de la familia Helianos, que es griega y que, por distintas circunstancias, se ve en la necesidad de tener que compartir su vivienda de Atenas con un oficial nazi. Este responde al nombre de Capitán Kalter y si por algo destaca es porque someterá a los miembros de la citada familia a todo tipo de humillaciones y torturas psicológicas.
Un sufrimiento ese que irá aparejado al sometimiento de Grecia a los nazis, que parecen imparables y que están haciendo que la cuna de la civilización occidental quede totalmente subyugada a sus crueles intenciones.
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