Sin duda alguna, no hay género que se le resista. Joyce Carol Oates es una prolífica autora norteamericana que, sin embargo, donde se siente más a gusto es en la narrativa. En ella ha dado lugar a obras que han conseguido no sólo atraer al público lector sino también lograr el reconocimiento de la crítica. De ahí que cuente con diversos premios de importancia como el National Book Award y de que haya sido nominada en varias ocasiones a galardones de relevancia como el Pulitzer o el Nobel.
Entre los trabajos de mayor importancia de dicha escritora nos encontramos, por ejemplo, con la novela titulada ¿Qué fue de los Mulvaney? En el año 1996 fue cuando vio la luz dicho trabajo que gira entorno a la familia americana que le da nombre.
Aquella está formada por un padre que tiene mucho éxito en el ámbito laboral, por una madre que a todo el mundo enamora y por cuatro hijos, tres varones y una chica que llama la atención por su belleza. La felicidad parece reinar en sus vidas, sin embargo, el cruel destino actuará y eso lo cambiará todo.
En concreto, lo que sucederá será un grave incidente en el año 1976 en el que la protagonista será la pequeña. Un hecho del que nunca se hablará en ese hogar pero que vive con ellos de manera perenne desde entonces. Una historia, la felicidad pasada y el cambio radical, que será contada años después por el hijo menor varón que realizará un recorrido por aquella sin olvidar ni las penas ni las alegrías vividas.
Rebeldía juvenil
Una familia vuelve a ser también el eje central de la novela que Joyce Carol Oates publicó en el año 2007: La hija del sepulturero. En este caso, el núcleo familiar vertebrador de esta historia son los Schwart, que deseosos de abandonar la Alemania nazi en la que están viviendo llegan a Estados Unidos buscando un nuevo rumbo.
Sin embargo, el cambio no será nada fácil. Y es que el padre, que es profesor, aquí como inmigrante a lo más que puede aspirar es a trabajar como sepulturero. Así de un día para otro comienza a desarrollar su empleo en el cementerio al tiempo que él y el resto de los miembros de su familia tienen también que hacer frente a los distintos prejuicios que existen en la localidad donde viven.
Pero ante todo eso se rebelará una de sus hijas que empieza a dar sus pasos para salir de esa situación y lo hace entrando en una complicada corriente marcada por el erotismo.
Precisamente este personaje femenino tiene mucho que ver con la protagonista de otra de las novelas de la autora que nos ocupa. En concreto, nos estamos refiriendo al libro titulado Una hermosa doncella que fue publicado en el año 2011.
En dichas páginas se nos habla de Katya Spivak, una chica de dieciséis años, que por casualidad conoce a un maduro que le resulta muy interesante pues tiene una vida totalmente opuesta a la suya y la consigue asombrar con su espectacular casa, los libros que ha escrito, las obras de arte que conserva, la música clásica y con los regalos que le hace.
Con el pasar de los días la situación llegará a un punto en el que Katya cree saber lo que el hombre quiere de ella, la desea. Pero ¿a dónde irá a parar esta relación?, ¿qué obtendrán los dos de la misma?
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