3 novelas con protagonistas indispensables

Hay miles de historias que nos han cambiado la vida. En mi caso hay decenas de personajes que me acompañan desde que los vi por primera vez.

Para mostrar un pantallazo variopinto he escogido tres que me parecen alucinantes y que han modificado en alguna medida mi vida. No dejen de recomendarnos cuáles son sus favoritos.

El príncipe idiota, de Fiódor Dostoyevski

El Príncipe Myshkin es uno de los personajes dostoyevskiano que más me gusta. Es el protagonista de «El príncipe idiota», y podríamos caracterizarlos como un hombre atormentado, que ha llevado una vida solitaria e intenta reencontrarse con sus raíces.

Myshkin padece una dolencia poco frecuente en la época, o mejor dicho, de la que todavía se ha descubierto bastante poco: epilepsia. En aquella Europa de mediados del siglo XIX las personas epilépticas recibían el apodo de «idiotas», haciendo alusión a las torpes crisis que dominaban su cuerpo impidiendo que pudieran actuar con normalidad, porque todavía se desconocían las verdaderas razones que la provocaban.

Con tan sólo 4 años es enviado a Suiza para ser tratado por un médico. Siendo huérfano de ambos padres, se queda allí durante años en casa de un tutor. Cuando su tutor también fallece, Myshkin regresa a Rusia. Este regreso a su tierra natal se encuentra narrado con unas imágenes literarias maravillosas: los sentimientos de nostalgia (recuerdos lejanos de un país ya inexistente) se entremezclan con la realidad (hallarse perdido en la gran San Petersburgo) y lo llevan a cuestionarse cosas de naturaleza vital. Y, qué les voy a decir. La forma en la que Fiódor consigue presentarnos y hacernos vivir a través de ese personaje es única.

Además en esta narración nos encontramos con importantes postulados en torno a la pena de muerte, a la soledad y al patriotismo; que creo sumamente destacables. Un libro que, sin lugar a dudas, les recomiendo muchísimo.

El amante, de Marguerite Duras

No puedo evitarlo. Marguerite Duras, es una de las autoras que más me cautiva. Me gusta su forma de enfrentar la literatura. Es como si en cada una de sus palabras hubiera lugar para el desgarro y a la vez una débil luz de esperanza.

«El amante» es una de esas obras que no te dejan indiferente y su protagonista es una de las construcciones más fuertes (desde mi humilde punto de vista) conseguido por la autora vietnamita. La forma en la que se presenta esta joven adolescente es potente. Una de las primeras frases es la siguiente:

Por otro lado, la forma en la que se va construyendo la novela es muy interesante. El hilo central de esta historia es una relación apasionada entre una jovencita y un hombre de origen chino; no obstante, a través de toda la obra nos encontramos con el pasado de esa niña y vamos descubriendo el modo en el que se han ido tramando sus relaciones familiares.

Se trata de una novela de corte autobiográfico: se encuentra escrita en primera persona, por alguien que revisa su pasado en la voz de la protagonista y escrita a modo de diario. Está dividida en muchas partes, que se encuentran entrelazadas a través de hechos claves.

A simple vista podría tratarse de un diario que es rescatado de un baúl, con recuerdos escritos a modo de retazos, a través de los cuales se reflexiona sobre cuestiones humanas y sociales, como la pobreza, la pasión, la sexualidad. El deseo y la pasión podrían considerarse los motores fundamentales de esta protagonista.

Lágrimas en la lluvia, de Rosa Montero

Bruna Husky es el tercer personaje de hoy; es la protagonista de «Lágrimas en la lluvia», la última novela de Rosa Montero. Bruna es una replicante que vive en un mundo devastado; donde el odio ha corrompido a la sociedad y el especismo ha llegado a límites exacerbados. Nació, mejor dicho fue construida, a los 25 años. Es una androide a la que se le han implantado recuerdos y ha sido preparada para luchar.

Una de las cosas más cautivadoras de Bruna es la noción que tiene sobre la muerte. Los replicantes viven un máximo de 10 años y cada día Bruna hace su cuenta regresiva, para saber cuánto le queda de vida. No obstante, no disfruta del tiempo. Vive entre el miedo a que llegue el día de la muerte por un lado, y por el otro la necesidad de que suceda cuanto antes, y esto le impide disfrutar de su día a día.

Lo atractivo de Bruna va mucho más allá de su destreza física y sus habilidades motrices, que superan a cualquier humano, es la forma en la que experimenta la vida. Algunas críticas expresaban que se trataba de un personaje muy humano, yo me inclino por creer que era un ser sintiente. Puede que se pareciera a los humanos, pero también a los animales, y por qué estamos seguros que NO, a los robots.

A lo largo de esta novela vamos descubriendo las debilidades, los miedos y la pasión escondida de esta REP que le teme tanto a la muerte como a las relaciones; quizás una sea consecuencia de la otra. Después de haber amado mucho, y de haber perdido a ese individuo que le hacía feliz, Bruna se ha enfocado en su trabajo dejando de lado todas sus emociones; incluso ni siquiera disfruta de la comida y de los pequeños placeres de la vida.

Ya no les cuento más, los animo a leer también esta novela fabulosa de Rosa Montero.