5 novelas sobre la Edad Media en España


 
 
 

Seguimos con los libros ambientados en diversos períodos históricos. Los amantes de la novela histórica, están de suerte porque hoy toca enfocarnos en una época que goza de muchísima popularidad: la Edad Media en España. Un período muy próspero en muchos aspectos pero también muy salvaje.

Vamos a repasar algunas novelas que nos permiten conocerlo en detalle a través de tramas interesantes y de buenas ambientaciones.

 
 
 

«Catalina de Lancaster», de María Teresa Álvarez

María Teresa Álvarez ha indagado en las vidas de algunos de los personajes más relevantes de la Historia de España. En este caso, tenemos una novela que nos invita a conocer a una mujer fundamental para las alianzas de la Corona de Castilla. Catalina de Lancaster, es una joven inglesa a quien casan con Enrique de Trastámara, cuando él tiene tan sólo 9 años. Juntos serán los primeros príncipes de Asturias y calmarán la enemistad entre dos poderosas familias.

María Teresa da voz a Catalina de Lancaster, abuela de Isabel la Católica, y nos cuenta cómo fue la vida de una de las mujeres más interesantes y fuertes de la nobleza española. Una novela que indaga en su intimidad, en sus miedos pero sobre todo en su gran capacidad para enfrentarse a los adversarios y defender lo que le corresponde por ley.

«Tariq y Musa. Conquistadores de Al-Aldalus», de Antonio Torremocha Silva

Entre los episodios más significativos del Medievo no podemos olvidarnos de la formación de Al-Andalus y los conflictos que supuso este territorio para la Corona de Castilla. En esta novela tenemos la oportunidad de conocer los detalles del avance del ejército bereber sobre los hombres de la corona, que los doblaban en número.

Con una estrategia impecable y una gran capacidad para apoderarse de los cascos más importantes del sur de Hispania.

Tariq ben Ziyad y Musa ben Nusayr son los dos protagonistas de esta novela. Vamos a conocerlos desde jóvenes y los acompañaremos en su ascenso al poder. Dos personajes fascinantes que, como tantos otros, fueron cegados por la ambición y terminaron de la peor forma que puede desear acabar cualquier persona: solos y olvidados.

«La sombra del templario» de Núria Masot

Esta lectura nos lleva al año 1265 cuando la aparición de un peculiar pergamino provoca una búsqueda desesperada por parte de los organismos más poderosos del momento. ¿Qué secreto contienen estos pergaminos que han puesto patas arriba el orden de la Europa Medieval.

Una de las características destacables de esta novela es la tensión. Núria consigue llevarnos a través de un camino de misterio, traiciones y espionaje con muchísimo acierto, provocando en nosotros el deseo de seguir hurgando en la misteriosa historia de la civilización.

La sombra del templario reúne las cualidades de una buena novela histórica con la justa mezcla entre este género y el buen suspenso. Sin duda, es una muy buena lectura para adentrarse en la España del medioevo.

«Juana de Castilla», de María Teresa Álvarez

Si hay un personaje fascinante en la Edad Media de España ése es Juana I de Castilla, más conocida con el alias Juana la Loca.

Esta novela de María Teresa Álvarez nos permite conocer a esta reina vapuleada desde su intimidad, para recorrer su vida y el hostigamiento que debió soportar desde joven por parte de los hombres que la rodeaban.

Juana, silenciada por el poder, adquiere voz en esta novela y nos cuenta cómo ha sido su vida, su relación con su madre y con el poder, y nos transmite sus pensamientos en ese encierro interminable al que fue condenada.

«La Beltraneja. El pecado oculto de Isabel la Católica», de Almudena de Arteaga

Seguramente, entre los misterios nunca resueltos de la Historia de España vuela el halcón de la ilegitimidad de una de sus mujeres más poderosas: Isabel la Católica. En esta novela, Almudena de Arteaga se aferra a un personaje que durante siglos se ha intentado esconder de la luz, para no ensombrecer la imagen de una de las reinas más poderosas que han tenido estas tierras.

Juana la Beltraneja, hija de Enrique IV, era en verdad la heredera del trono de Castilla, pero nunca pudo ocupar su lugar porque Isabel y sus partidarios consiguieron quitarle ese derecho, escondiendo el testamento de su padre y tiñendo su nombre de historias de bastardía.

Esta novela retrata un tiempo de falsificaciones matrimoniales, bulas papales y traiciones de todos los colores, que pone en duda la cualidad legítima nada más ni nada menos que de Isabel I la Católica.



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