Las obras teatrales más interesantes de Benito Pérez Galdós

Aunque es conocido, sobre todo, por sus Episodios Nacionales (1872 – 1912), La Fontana de Oro (1870) o Fortunata y Jacinta (1886), no podemos olvidar que Benito Pérez Galdós fue también un gran dramaturgo.

Buena muestra de eso es que nos legó una larga lista de obras teatrales de gran calidad y que hoy, a pesar del paso incuestionable del tiempo, siguen representando en numerosos escenarios españoles.

Si aún no has leído ninguna de esos trabajos de teatro, te recomendamos los que, bajo nuestro humilde punto de vista, son los más interesantes de cuantos salieron de su pluma:

Los condenados

En el año 1894 fue cuando se estrenó esta obra dramática que gira en torno a un triángulo amoroso, el formado por Salomé, Santiago y José. La primera es una mujer a la que se le compromete en matrimonio con Santiago, sin embargo, ella no está enamorada de él, por quien bebe los vientos es por José, un bandolero.

El prometido, conocedor de esta historia de amor, decide dejar libre a su prometida para que pueda ser feliz al lado del hombre que desea. Así será como los enamorados intentarán comenzar a vivir juntos, pero, por falta de dinero, José decide pedir ayuda a una ex amante. Una noticia esta que llegará a oídos de su novia, quién enloquecerá de celos y será capaz incluso de delatar a aquel ante la justicia por todas las fechorías que ha cometido.

Ese sería el principio del fin para la pareja que caerá en un pozo del que ya no lograrán escapar.

Voluntad

Rompedora y adelantada a su tiempo. Así es como podemos definir a esta otra obra teatral de Benito Pérez Galdós, estrenada en el año 1895. Y es que toma como protagonista a Isidora, una joven que acaba con todos los estereotipos y convicciones morales que la sociedad de aquel momento le tiene impuestas a la mujer.

Así, será capaz de ponerse al frente del negocio familiar, por delante de su padre y de su hermano. Pero, además, se enamorará perdidamente de un hombre, Alejandro, lo que le llevará incluso a plantearse convivir con él bajo el mismo techo sin necesidad de tener que pasar por el altar.

Sor Simona

El Teatro Infanta Isabel de Madrid fue el que, en el año 1915, acogió el estreno de esta obra, que toma como personaje central a la mujer que le da título. Se trata de una fémina que decidió tomar los hábitos como consecuencia de un gran desengaño amoroso.

Sin embargo, con el paso del tiempo volverá a encontrarse con ese hombre del que estuvo enamorada, quien le pedirá un favor muy importante en plenas Guerras Carlistas. Le rogará que interceda por su hijo, un joven liberal, para evitar que pueda ser encarcelado y asesinado.

La llama de la pasión volverá a estar patente en la religiosa que no dudará en mentir y en romper con sus votos con tal de salvar la vida de ese muchacho.

¿Te animas a leer estas obras teatrales?