¿Por qué Juan Manuel Gil ha ganado el Premio Biblioteca Breve?

Pocas cosas me causan más alegría que el reconocimiento del talento literario a personas por las que siento un especial afecto. Por eso, el merecidísimo Biblioteca Breve a Juan Manuel Gil me ha causado una gran alegría. Y me parece una extraordinaria ocasión para hablar de este escritor.

Aunque los medios destacan la idea de que Gil no es un escritor conocido, quien lo haya leído sabe que es uno de esos autores al que la justicia literaria ha tardado en llegarle. Desde sus comienzos mostró una solidez literaria que demostró oficio y compromiso con la palabra. Por eso, es evidente, que era cuestión de tiempo de que su obra adquiriera una sonora notoriedad. ¡Y qué alegría lectora me causa esto!
 
 

La obra de Juan Manuel Gil

La obra de Juan Manuel Gil se destaca por una solidez y una dirección en la narración que no es muy frecuente en el universo literario. Aunque su primera novela no he podido leerla aún (quizá sea éste un buen momento para que ese western vuelva a rodar por las calles), las dos siguientes han sido magistrales.

«Las islas vertebradas», publicada por Playa de Ákaba, es una novela donde el tema principal podría ser la deriva que puede imprimir sobre un hombre la orfandad. Felipe, el protagonista, ha llegado a una isla para empezar de nuevo, para reconstruir su pasado y entender su relación con el lenguaje. ¿Cuáles son las palabras que nos marcan a fuego? Ésta es una de sus principales inquietudes. La forma en la que Gil consigue tramar la historia y sostener el misterio, sin irse del todo del realismo, es realmente alucinante. Si quieres saber más puedes leer la reseña de «Las Islas Vertebradas», publicada cuando salió la novela. Y esta entrevista con Juan Manuel Gil, en la que conversamos sobre la escritura de este libro.

Y ahora voy a hablar brevemente sobre «Un hombre bajo el agua», publicada en Expediciones polares: una de las mejores novelas que leí en 2019 y a la que he vuelto recientemente, volviendo a maravillarme por el exquisito trabajo narrativo. Aquí, Juan Manuel Gil nos ofrece una historia que está a mitad de camino entre realismo y misterio; lo que le sirve para poner sobre la mesa la idea de que la realidad siempre está condicionada por la perspectiva de aquel que la mira (o la narra). Es una de las mejores novelas de autoficción que he leído: Gil es de los pocos que ha entendido cuál es la idea de este género al resolver de entrada qué lugar (y relevancia) tiene la verdad cuando nos narramos. Una novela buenísima que ojalá todo el mundo vaya a leer con entusiasmo. Aquí te dejo la reseña que escribí cuando tuve la suerte de leerla.

Juan Manuel Gil es un escritor extraordinario. Por eso, saber que, finalmente él y su obra estarán en boca de todos, me llena de alegría. No te lo pierdas, por nada del mundo.

Biblioteca Breve a un narrador de oficio

El Premio Biblioteca Breve que tiene una extensa trayectoria, se ha propuesto en los últimos años poner en escena a autores y autoras que no gocen de gran popularidad. Tal fue el caso de Raquel Taranilla, ganadora el año pasado y de Juan Manuel Gil, a quien acaban de entregárselo, por su novela «Trigo limpio».

El jurado, formado por los escritores Vila-Matas, Olga Merino, Pere Gimferrer y Raquel Taranilla, expresó que es una falsa novela de detectives, y destacó el trabajo narrativo de búsqueda de sentido, donde realidad y ficción nunca son opuestas, sino caminos paralelos que fluyen y se retroalimentan. Esta idea, que Juan Manuel Gil ya ha trabajado de forma magistral en sus novelas anteriores, y que, posiblemente, aquí alcance otras dimensiones. Dan ganas de leerla.

El punto de partida de «Trigo limpio» es la remembranza de un momento clave en la infancia del protagonista, que es un escritor. A partir de ahí habrá una indagación sobre el pasado, para conseguir reconocer la verdad escondida (o protegida) por la memoria. Es una historia que transcurre en los años 90 y en la que Juan Manuel Gil regresa a su obsesión en torno a lo que parece verdadero y lo que realmente lo es: esa débil línea que divide realidad y ficción.

¡Qué ganas de volver a leer a este gran escritor! ¡Ya tienes una buena razón para leer sus novelas anteriores, que son brillantes!

Foto: El Confidencial