¿Por qué leer a Osvaldo Lamborghini?

¿Quién puede escapar a la poesía? Yo no, por eso siempre me gusta leer o releer a viejos autores y cada tanto escribir algo para compartir mis pareceres con ustedes. Hoy voy a presentarles o a recordarles a un poeta argentino del siglo pasado, Osvaldo Lamborghini, que seguramente a muchos de ustedes les cautivará.

Breve biografía de Lamborghini

Osvaldo Lamborghini nació en la ciudad de Buenos Aires el 12 de abril de 1940 en una familia peronista. Su padre trabajaba para el gobierno de Juan Domingo Perón y en su juventud, Osvaldo se unió a este partido, en el cual consiguió un importante protagonista.

En 1973 publicó su primera obra «El Fiord» con la editorial Chinatown. Esta obra tuvo una importante repercusión en el público, no sólo por el contenido sino también por el aire refrescante que el autor imponía sobre la literatura nacional. Un estilo auténtico y que dio a muchos de qué hablar.

En 1976, año en que el Peronismo es derrocado por las fuerzas armadas y que se implanta la dictadura en Argentina, Lamborghini tuvo que exiliarse y lo hizo en España. Allí vivió hasta 1985, cuando falleció a causa de un infarto.

Rompiendo con viejas estructuras

Lamborghini fue un escritor polémico desde sus comienzos; su estilo rompió con los cánones pautados y utilizados por la literatura argentina de aquel entonces, que venían de principios de siglo.

En su obra presenta versos cargados de imágenes grotescas, de violencia tanto psicológica como física. En este punto podría asemejarse su estilo al de Roberto Arlt, también en el uso del lunfardo y la jerga política podría acercarse al estilo del autor de «El juguete rabioso» y en que ambos intentan demostrar en sus creaciones las imperfecciones humanas, las contradicciones, la falta de justicia en la sociedad y el éxito de los infames por sobre los seres humildes y bondadosos.

En su obra se presenta la marginalidad como un elemento característico, que invita a la reflexión a través de la parodia y de las imágenes exageradas o pornográficas.

Además hay una manifiesta idea de la decadencia en la que se encuentra la humanidad, la cual lo lleva por los caminos de tres tipos de violencia, la física, la sexual y la psicológica; esto explica que en todos sus textos aparezcan protagonistas que han padecido algún tipo de abuso o que lo han generado. Un ejemplo claro de ello puede encontrarse en «El niño y su relación con su madre», donde el autor dice:

¿Por qué escoger la parodia o la violencia?

En una entrevista, Lamborghini expresó que en una parodia los complementos fundamentales son el odio y el amor; es como un amor fracasado y decir esto en sí mismo es hablar de una contradicción, porque si hay amor ¿cómo puede existir el fracaso? Asegura que una parodia no degrada al individuo porque se trata de una creación imaginaria, se trata de conseguir llevar todos los sentimientos y vivencias al extremo, de ser ruin hasta que ya no comprendamos quien somos, por ejemplo.

Todo en Lamborghini, dice el mismo autor, es parodia y en algún sentido podría ser irreverente, quizás porque los escritores no pueden hablar de pavadas, deben comprometerse y en ese compromiso muchas veces deben decir o hacer cosas que para el resto de la gente puedan resultar chocantes, desubicadas o irreverentes.

Según Néstor Perlongher, quien buscó clasificar la obra de Lamborghini, su obra se encuentra impregnada de la estética del Neobarroco, movimiento latinoamericano que cuenta con la presencia de cierta musicalidad, gracias y artificio picaresco que se encuentran enfocados desde el racionalismo y el ingenio del Río de la Plata. El propio Néstor Perlongher se identifica con este movimiento literario.

Sin embargo, esta declaración sobre Lamborghini carece de exactitud ya que en él la simbología es reemplazada por la acción (no se escribe el dibujo o le tatuaje sino el acto de tatuar). Así, esa violencia que se desprende de su obra no es simbólica sino realista, cruel y llena de colores y olores; en Lamborghini la violencia parece sustentar no sólo el contenido sino también la estructura y esta podría ser una de las razones principales por las que deberíamos leerlo.

Lamborghini ¿poeta maldito?

Lamborghini es uno más de los cientos de poetas olvidados a causa del exilio; en Argentina no es un poeta que se lea mucho y su mayor producción literaria ha sido producida en España.

Pese a cambiar rotundamente de vida no dejó de escribir ni de criticar en su obra a los seres humanos y a las sociedades, utilizando los elementos característicos de su obra: la violencia y la parodia. Este exilio y el olvido de su país lo ha hecho parte de la lista de los «escritores malditos», en la cual también se encuentra Alejandra Pizarnik. Este hecho es lamentable si se tiene en cuenta que pocos autores como él han marcado un antes y un después, y sobre todo si se somos conscientes de que parte de la literatura argentina actual no existiría si no hubieran nacido autores como Osvaldo capaces de enfrentar la violencia desde el realismo y desde imágenes directas y claras.

Todos tenemos ciertas inclinaciones para escoger nuestras lecturas, sin embargo creo que aprender a leer cosas variadas puede ayudarnos mucho a la hora de crecer no sólo como escritores sino también como personas. Leer a Lamborghini seguramente puede proporcionarnos una herramienta única para captar la verdadera esencia del neobarroquismo latinoamericano.

Pero principalmente, creo que es bueno leerlo para entender que la literatura es un espacio para sentirse libres y que atarse a las estructuras planteadas por la teoría de cada época es uno de los peores errores que puede cometer un autor, y que no cometió Osvaldo Lamborghini.