En unos días, el 14 de septiembre se conmemoran los 50 años del fallecimiento de Vasili Grossman, y me parece una buena oportunidad para invitarlos a leer una de sus obras más importantes «Vida y Destino». Por eso, he querido incluirla en los rescatados de El Desván de los libros perdidos.
Se trata sin duda de una obra imprescindible para comprender la invasión alemana de Unión Soviética en el año 1941 y la vida de los soldados soviéticos.
La guerra que todo se lo lleva
En este libro nos encontramos con una detallada pintura de la batalla de Stalingrado, uno de los más cruentos enfrentamientos de la historia de Europa. Un conflicto en el que cientos de soldados alemanes y soviéticos perdieron la vida, dejando un río de sangre y desolación en el continente.
Una madre que ve partir a su hijo a quien no volverá a ver; le mostrarán una tumba en la que su pequeño descansa para siempre junto a una decena de soldados muertos el mismo día. Una joven enamorada que ve partir a su amado al campo de batalla, y sabe que posiblemente no podrá verle de nuevo. Un científico que recibe una carta de su madre (judía) que es escrita desde un campo de exterminio. Estas son las principales historias que nos presenta Vasili en esta obra monumental; historias de individuos a quienes la guerra los marca de una forma u otra.
Grossman nos acerca con maestría al corazón frío de la guerra, a sus consecuencias y nos invita a reflexionar en torno a la violencia en todos sus aspectos: en la intimidad del hogar y en la sociedad. Creo que en estos tiempos convulsos que vivimos en los que de alguna forma nos hemos acostumbrado a que la violencia extrema forme parte de nuestras vidas; de la que hablan todos los medios y de la que, incluso, ciertos grupos hacen apología, esta obra puede servirnos para recordar todo lo que la violencia en general y la guerra en particular provocan en la vida de las familias, en las sociedades y en el corazón de las personas.
La obra máxima de Vasili Grossman
Vasili Grossman nació en Berdychiv el 12 de diciembre de 1905 y fue un escritor ruso descendiente de judíos que trabajó como corresponsal de guerra para el Ejército Rojo. Entre las obras surgidas de ese período podemos mencionar «Estrella Roja», una recopilación de crónicas recogidas durante las batallas de Moscú, Stalingrado, Kursk y Berlín. Cabe mencionar que fue uno de los primeros autores en escribir acerca de la vida en los campos de exterminios. Después de ser liberado del campo de Treblinka comenzó a denunciar los crímenes cometidos contra el pueblo judío durante la guerra. Sus textos tuvieron una importancia ineludible en la resolución de los juicios de Núremberg; siendo tomados como prueba fehaciente del holocausto contra los judíos.
Vida y destino es sin duda la máxima expresión de las capacidades literarias de Grossman pero lamentablemente, él no llegó a saberlo. Durante la dictadura de Stalin se le impidió publicar nada, amenazándolo de muerte si lo hacía. Cuando Vasili falleció, víctima de un cáncer de estómago el 14 de septiembre de 1964, esta obra continuaba inédita. Y recién vería la luz veinte años más tarde. En cuanto vio lo hizo, se convirtió en una de las obras cumbres de la literatura europea del siglo XX.
En este libro Grossman dejó constancia de la escasa preparación y conocimientos que tenían los soldados que iban a combatir; lo poco que sabían de lo que les esperaba en el campo de batalla e incluso la falta de información en torno a las razones por las cuales luchaban. Es, una más de las muchas obras que nos devuelven a esa eterna pregunta: si tantos autores han escrito en contra de la guerra, si ya sabemos de sobra que nunca se resuelve nada con tanta muerte ¿por qué sigue siendo la guerra uno de los reincidentes elementos en la historia del mundo?
La contradicción de la guerra
Esta obra fue recuperada por Galaxia Gutenberg y publicada en una versión extendida que les recomiendo muchísimo. Estimo que pese a que Grossman no alcanzó la popularidad que sí pudo conseguir Tolstói con su Guerra y Paz, debe ser uno de esos autores al que acudamos y regresemos; en él podemos encontrar un gusto exquisito por la estética, donde cada palabra parece escogida con detenimiento, y una constante conducta de reflexión ,que dota a sus letras de un carácter profundo y las vuelve imprescindibles.
Escoger una frase de toda esta obra es complicado; Grossman es realmente un autor que te hace creer que todo lo escrito debe ser recordado. No obstante, me quedo con una escena que me parece impresionante. En ella hay un soldado soviético tomado de la mano en medio de la oscuridad de un soldado alemán (enemigo) creyendo que es uno de sus compañero. Al darse cuenta ambos de quién es el individuo al que se encuentran unidos se separan, incapaces de asesinarse; y se alejan sabiendo que están faltando a su obligación de matar a todos los enemigos. Creo que esta escena puede servir para comprender la inmensa contradicción que encierra la guerra y podría simbolizar de forma clara lo que encontrarán en este libro.
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