El lienzo de tu mirada cae sobre mi, me cobija, me enciende, me llama, me lleva ala gloria y no pienso en otra cosa mas que en el pleno extacis de nuestra inaudita pasion, te llamo te idolatro, pienso que eres un ser maravillso, penetras en mi mente, entras por cada uno de mis poros, extaciados de ti, de tu ser, de tu ardiente llama, es como provocar mi propia eutanacia.
Es un ir y venir de un laberinto, donde no quiero encontrar la salida donde quiero permanecer en el placer de tu cuerpo, donde solo se olle el lamento de un gemido que pronuncia tu nombre, donde brotan lagrimas color rojo pasion.
Mi sonrrisa se pinta de un color purpura, de nuestro cielo infinito caen petalos de flores, con aromas indescriptibles, vainilla, canela, orquidea, rosa.
Te miro en un frenesi empapados, cansados sedientos felices los dos mientras que las estrellas y la luna se regocijan ante la union de un amor eterno.