ENTREGA
Mis pechos respiran después de haber estado unida a tu cuerpo en un estrujante abrazo mis piernas están semiabiertas. Sin descaro, pero incitando. tus brazos siguen alineados a lo largo de mi cuerpo, con las palmas de mis manos acaricio la sábana. la cual solo rosa mi cuerpo. Mi corazón late deprisa. O lento. Ya ni lo sé. Comienzas besando mis hombros, bajas a los pechos, al vientre. De nuevo a los pechos. Me acaricias con ternura. Con mimo. Siento ganas de llorar. Me miras. Te miro a los ojos. Me perviertes la visión. Me duele y Me alboroza a la vez. Me excitas. Veo esas manos morenas en mis pechos, jactándose de mis pezones. y veo como se endurecen por los besos y caricias. Observas mi vientre al subir y bajar al compás de esa respiración excitada. Miras más abajo. me siento atrapada cuando haces una ligera separación de mis labios. Noche tras noche soy tuya. te pertenezco. pero al amanecer mis pechos siguen siendo objeto del deseo de esas manos expertas. Los pezones permanecen duros. Desafiantes. tus manos bajan al vientre. Más abajo aún. Al lugar dónde el nuevo suspiro quiere romper y aparecer. Rodeas la parte mas fina y delicada de mi ser fijandote en el interior de mis muslos. Con presteza. Con sensibilidad. La misma sensibilidad que usas para acariciarme, Frotas con empuje, con delicadeza a la vez, con insistencia.Los primeros jadeos y suspiros irrumpen en la habitación. Miro tu cara. tu labio inferior es mordido con mis dientes superiores. tu cara refleja placer. Tus dedos han penetrado con delicadeza. Dos de ellos dispuestos a explorar tratando de extraer hacia el exterior el flujo que mana confundido con el juguetear de tu boca. Los valientes índice y corazón permanecen dentro. Hacen movimiento de retracción, acariciando el punto G. Cansados tal vez, giran sin salir del refugio que los acoge. vuelven a acariciar el punto G. Mi ego de mujer trata de juntar mis piernas. los gemidos ya son constantes. los jadeos visibles. Tu agitación patente.Tus dedos Penetran como si de un pequeño pene se tratara. Estan perfectamente coordinado con el dedo corazón que se afana por profundizar, no paras de emitir esos sonidos que yo conozco bien. Esos sonidos que agradecen la penetración que me haces Esos sonidos que son la víspera del orgasmo. Abandonando el pudor, manifiestando el deseo, el placer, la locura. Cada vez más. Cada vez más escandalosamente. Creo adivinar en tu mirada un deseo. Te deseo con urgencia. deseo que me colmes y me hagas gritar de placer. Pero no es el momento. estoy perdiendo el juicio. La moral. Los sentimientos estan presentes. Todo ha sido abandonado por el deseo de gritar un nuevo orgasmo. Implora algo. Implora compasión. Tal vez deseo que me penetres. quiero abrazar tu cuerpo a la vez que me embistes.Como un cómplice de nuestra entrega, el silencio. Como un invitado descarado, la luz del sol. Como un proceso embaucado unimos los cuerpos. la respiración se entrecorta de nuevo. los jadeos vuelven a escucharse otra vez. Más intensos. Tan intensos como las olas del mar. Quieres sentir ese orgasmo que llega y se frena en tu boca, tu frente. tu rostro. Las convulsiones sacuden mi cuerpo. Quiero ahogar el grito de placer. Las convulsiones me suceden una tras otra. haaaa que agradable placer.El canto del placer. la caricia se convierte en ternura. tu caricia es compasiva. Nunca antes había imaginado que sensaciones así se pudieran sentir. Nuestras miradas se hablan. Ambos pretendemos lo mismo. Ambos sentimos igual. Ambos acariciamos la misma posibilidad. Pero ambos sabemos que con el orgasmo en su fin, el encanto es mas grande, Ambos sabemos que desde el instante de penetracion seremos una sola persona y un solo ser. prisionera entre tu cuerpo el mío explota. Las salvas escapan calientes. Las noto en mi vientre. Sus ayes son constantes. El suspiro se instala en tu boca. Mis ojos se abren. El techo es mi visión. Mi cuerpo yace reposado. Estoy desnuda. Mi brazo doblado descansa sobre mi frente. quiero recordarlo todo. Giro mi cabeza deseando que esto no sólo haya sido un sueño. La imagen no ofrece dudas. Soy tu mujer, con los ojos cerrados a mi lado suspiras satisfechoTras la agitada entrega que por las mañanas tenemos los dos.Mis ojos se abren. El techo es mi visión. Mi cuerpo yace reposado. Estoy desnuda. Mi brazo doblado descansa sobre mi frente. Quiero recordar este momenmto en qué estoy desnuda junto a ti. Cierro los ojos de nuevo. Necesito visionar mis recuerdos. Escrutarlos uno a uno. Repaso mentalmente lo sucedido después de las convulsiones de mi esencia mujer.
The Prince Roussy