Tu rechazo tengo merecido
por jugar con tus sentimientos
y aunque lloro y me lamento
sé que todo está perdido.
Pues, un gran cobarde he sido
tú rechazo y desprecio merezco
aunque mil disculpas te ofrezco
eso no curara tu corazón partido.
No estoy en posición de pedir
pero, aun, así yo lo hare
porque sino en paz no voy a vivir.
Te pediré que a donde vayas
perdones porque ninguno perfecto es
solo Dios, el amigo que nunca falla.
AUTOR: MAURICIO CRUZ AGUIRRES