Yo seguiré el aroma de tu sexo en la noche
sentiré la palabra que fluye
aquí en mi oído…,
tú te irás como el humo
que se esparce en mi cuarto
…despídete de todo
de mi mano -de mi boca-
que yo me he despedido
de tu sexo y tu aroma.
También le he dicho adiós
a tu seno que adorna
mi labio… que excitado
dejaste hundirse en él
con gracia -con descaro-
pero te dije adiós –quebradizo- -turbado-
y guardé silencioso
tu recuerdo en mi armario.