Llego en una noche de tormenta,
entre mis nublados silencios
tenia mil pesares por delante, y entre sollozos me pedía,
solo quería evitar y seguir navegando en el silencio de Morfeo.
.
Llego como quien no espera nada y pide todo,
con la mirada abajo, y abierta al destino,
despacio, sin prisa alguna,
con la calma de todos los mundos.
.
Llego en carne y vida mas haya de la física,
alumbrando mis días, llenándome de alegría
de sueños, a la realidad,
en alma y eternidad.
.
Deja al amor pasar,
el tiempo marchar,
quédate sin desvanecer,
yo con mi alma te protegeré
.
todos los derechos reservados
Roxana Correa