Exótica mirada, mujer
me envuelve en un mundo
donde por un segundo
tus intenciones puedo ver.
¡Oh!, no me veas, por favor, así
te gritaba asustada mi alma
con lo poco que me quedaba de calma
yo, también te imploraba a ti.
Pero, por diversión lo hacías
estando siempre vis a vis
se notaba que eras feliz
mientras, yo, por dentro sufría.
AUTOR: MAURICIO CRUZ AGUIRRES