Tock, Tock Llaman a la puerta
Una pobre vieja con una lagrima desprendida
Con la voz titilando diciendo
Una limosna por el amor de dios,
Se parece a mi madre
Tiene morados del frio, Llagas del sol
¿Donde están sus sentimientos? Aguanta Hambre (que deshonor)
¿!Por qué su egoísmo!?, ¿por qué olvidan?
Veo como su mirada llena de angustia me toca
Aun yo, sin alma me conmuevo
Tanta saliva qué le han tirado en su cara
La humillación de que ya es vieja
Su corazón no entiende por qué tan duro ha sido su destino
Quiero abrasarle y decirle que todo mejorara
¿Pero que basta con una?, si hay cientos mas
¡Ven madre mía¡
Come este pan que estuve dispuesto a tirar a la basura
Toma de esta bebida que iba a parara al caño
¿Para qué tanto dinero?, ¿por qué olvidamos por unos cuantos centavos?
¿Por qué la pisoteamos, ¿donde a quedado su corazón?
Mírale la cara demacrada
La vejes tirada, sus años dedicados a ud como hijos no conocidos
Sientan este peso delirante en su cobarde razón
¿Donde está dios? preguntan
Si no lo hay ¿por qué no dar la mano?
¿Por qué necesitan un juzgador para hacer lo correcto?
Malditos qué patean el estomago de esta vieja que llora sin comprender
¿por qué somos tan despiadados?
¿Por qué ella aun con su bondad pide una limosna?
Sin saber si tiene a su abuelo para alimentar
y yo uno más que no se conmueve con facilidad
Quiero tomarla y llorar, decirle que todo cambiará
Pero creo que le mentiría pues es una esperanza que nadie quiere forjar.