Que seria de mi vida
si un día tu
te marcharas,
tal vez mi vida vacía quedara.
Que daría igual si fuera de día
o de noche,
pues el sol para mi se apagara.
Ni el murmullo del río
o el canto del ave,
mi alma sanara.
Quedaría tendido en el lecho
de un arrollo seco,
que mis lagrimas
su afluente llenaran.
No creo desahogar
mis penas en ellas
por estar vacío,
sin consuelo de nada.
Partiré,
con mi única ropa
un cajón de equipaje,
al lúgubre lugar del olvido.
Amor,
e vivido por ti
pero me niegas el existir.
Así,
que tengo que partir
A la región del llanto,
donde todo es desolación y olvido.
Si te olvido,
no es por que yo e querido
si no por que mi corazón,
se queda contigo...
con el los recuerdos y el amor mío.
Aunque creas
que estoy ausente,
Estaré presente
en la brisa del campo
En el perfume de la tierra mojada,
Que con las lagrimas regué
En el pasto con su aroma a hierba,
Y el despertar de cada día.
autor:Adolfo Casas C