Se abre el telón, un hombre entra a escena...
Fatigado, desilusionado, cabizbajo se quita el saco,
llega con su mujer -cansada por un día de trabajo-
la abraza, le besa por doquier, la hace suya...
pelean, gritan, lloran... se aman, pero eso no cambia nada...
Pasan lo días, semanas, él va al doctor... Psiquiatra, esta deprimido, quiere ayuda, ama a su mujer. El doctor le da una solución, putas, una aventura... se retira, habla con sus amigos, lo mismo...
Piensa y piensa, llora, golpetea, maldice... Se decide, camina por la calle, busca algo que lo convenza... ve de todo, decide retirarse y cuando voltea... la mujer perfecta, se enamora, reconoce el cabello negro, como el cielo, su piel su tormento... baja su mirada, puede estar equivocado, reconoce la espalda, las caderas, sus piernas... le toca el hombro, ella voltea. Le mira de pies a cabeza, le ve los pies, son pequeños, sus piernas tersas... su vientre, la marca del anillo... el lunar que él descubrió en su pecho, el cuello que él conquisto, esa cara. Pregunto su tarifa... pagó el doble, la tuvo esa noche, no pregunto.
Esta enamorado.