Como la brisa que me acaricia
despacio y sin prisa, así siento tus labios,
besando los míos encontrando mil motivos
para seguir amándote. Buscando entre las estrellas
Alguna de ellas que me guié hacia ti, entrando
en tu vida ofreciendo la mía; dulces momentos,
labios perfectos besos de miel, por ti sonreiré.
Sintiendo tu esencia, deseando tu ser.
Viajando a través de este mundo virtual
donde no existe la piel, experimentando,
las emociones, viviendo las pasiones,
he llegado a comprender… ¡Que eres mi mujer!