En el umbral del atardecer, escucho tus pasos Débiles, cansados y
fatigados de tanto andar, llevas a cuestas tantos años, que quizás no
tengas ganas de recordar, esos sueños truncados, sin realizar…
Esos tus pasos buenos te han llevado, por caminos insospechados,
labraste la tierra, abriste caminos y cruzaste el ancho mar. Hasta la luna
llegaste y la punta del Everest conquistaste solo con tus pasos y sin
batallar
Tus malos pasos, esos han quedado en el olvido, Como guardados en el garaje, para nunca recordar. Esos se quedan ahí escondidos, entre las hojas de olivo. Semejando coronas de triunfos, y sin decir la verdad…
Hombre decidido; ha salir siempre adelante sin dejarte Humillar, por aquellos altaneros, masoquistas, usureros, que sus pasos han llevado a donde reina la maldad. Y tu hombre sabio, has visto su alma negra, morir en soledad…
Los pasos del buen hombre siempre se deben seguir, para que sigas siempre adelante y sin temor a tropezar. Y en el umbral de la tarde, tus pasos cansados, aun se escucharan, pasos de amor, pasos de paz.