Se ha perdido la vida
y destrozado ha, su alma,
se van quedando marchitas
sus alegrías y sus ganas...
Ella se cubrió de día
y se desvitió en la alborada
llevando la mente vacía
y con las manos marcadas.
Hay desolación y un infarto
vino a causar este fin
retorcida cual lagarto
la esperanza muere allí.
Ella se a ido por siempre
a donde nadie le hable
donde palabras se callen...
para rodearse de lumbre.
Ella quiere renacer
del fuego eterno que dice
sufrir y desfallecer
para volver a nacer.