Armando G.
Elogios a una hermosa mujer
A ti dedico mi prosahermosa mujer de negra cabellerate he visto y me provocasen poses ofensivas, cuando me miras y sonríes siento el comienzo de mi vida. Hermosa mujer de ojos del negro color,negros como el azabache,que es negro radiante,negros al igual que el ónix y la obsidiana,ojos negros como valiosas perlascultivadas en profundos mares,tus ojos mirando el mañana,tus ojos de mirada triste y soñadora,me envuelven yme acarician en cada mirada. Tus labios,tus sensuales y dulces labios,provocadores labios y hoyprivados de besos,esperando al príncipe(aunque no creas en cuentosde hadas y príncipes enamorados)al hombre capaz de alejar tus miedos,tus recuerdos de fracasos y engaños de amores. Excelsa e intensa mujer,mujer de andar desenfadado,mujer sin miedo,sabes mujer como provocas los intensos deseos de amantesmoribundos por tus besos. Sabes mujer que enloquezcopor aspirar el aromade tu ardiente cuerpo,sabes mujermi sangre hiervecon solo mirar cuando caminaspor las plazas de tu pueblo,no imaginas cuantome provocas vestida de bailaoracon el contoneo de tu caderasal compas de la guitarra el cajón y la palmasen un delirante tablao. Hermosa mujer no calles,ven a mí,si no vienes,no sé qué hacersin tus besos.