Negra tu piel, al rojo vivo tus besos
Fuego tu amor, queman las caricias
el alma, la voluntad dejan de ser mías
Un cielo en el infierno es nuestro
Envueltos en sus llamas
Ardiendo en cada encuentro.
el pardo de tus ojos en mi clavado,
Incendiario aliento que arrasa
el infinito muestra su gloria
la eternidad se hace tangible
Pasión oscura, amor pagano, placer profano
Hombre de ébano, predilecto del sol
es tu cuerpo una antorcha, en ella crepito
me desintegro, en cenizas me convierto
al viento me entrego, te seguiré en secreto
en un verano intenso, haré saltar la chispa
que encienda tu candela, ahí estaré
arderé prendida a tus labios, una y otra vez