Corre un arroyo cantando
Los sonetos de la espuma
Coberteras de arroyuelos
Con embeleso lo escuchan.
Las montañas de la Sierra
La nieve está disolviendo.
Cantarinas las corrientes
Que bajan de la montaña,
Con cristalino esplendor
Entre la espuma del agua.
El monte de nieves altas
El agua está derritiendo,
Sabores muy cristalinos
Resuenan sin desaliento.
Surco de agua espumosa
Placenta de ríos grandes,
Corriente que van al mar
Del glaciar y nieve salen.
Los glaciares del collado
El hielo está disolviendo,
Miríadas de campo verde
Sobre la tierra creciendo.
Corre y entona corriendo
El regato desde el monte,
Coberteras de su margen
Resonando canta y corre.
Las montañas de la nieve
El agua está disolviendo,
Aplicando esos retumbos
A la fuerza de los vientos.
Con los cangrejos del rio
Lampreas así lo escriben,
La trucha recita al cauce
Balada del agua y nieve.
Los cristales de la nieve
En agua se tornan presto,
Saber apreciar su gracia
Que vale como alimento.
Los arroyos son arterias
Que vitalizan al hombre,
Sin agua muere la vida
Con ella la vida invade.
Autor:
Críspulo Cortés Cortés
El Hombre de la Rosa
18 de abril del 2011