***Distorsiones***
Por razones del destino
te cruzaste en mi camino,
amaramos el destino,
para ver que podía ser.
Te ame como a ninguna,
como no había amado
a nadie desde que mi
madre me mecía en la cuna.
Pero pronto el desengaño
se encargo de mi…
Y sin dudarlo te alejo de mi.
Quizás solo eras el reflejo
de aquello que yo quería ver,
quizás no eras mas ese ideal
de mujer que no existe.
O será que solo eras el reflejo
cruel de mis anhelos…
O la proyección distorsionada
de mis sueños…
Hoy sé que mas me valdría
ir enterrando y olvidando,
todos esos recuerdos que avivan
el fuego de tu presencia.
¡Créeme! Que lo he intentado,
pero de súbito he fracasado,
porque una legión de fantasmas
en mi alma han acampado.
Y cada intento lo minan con
tus recuerdos, con tu aroma…
Ya he exorcizado tantas veces
mis sentimientos…
He probado hipnotismo y alguno
que otro encantamiento…
Pero te lo digo no miento han sido
más bien llamas a las cenizas.
Sé que este sentimiento es inmune
al olvido y a la sustitución,
Pues en el desafuero de mi corazón
este siempre encuentra motivos
para amarte…
El único tiempo en que lo consigo,
si así se puedo llamar…
Es cuando fatigado y cansado vacio
mi alma incluso de mi.
Pero luego viene a mí una disposición
poética de amarte y mucho mas allá del
amor que puede contener mi pecho.
Entonces inunda mi entendimiento
y cual si fuera un eterno tormento,
te idealizo y ese imagen empieza
a cortejarme y otra vez vuelve a
enamorarme tu recuerdo.
Oxwell L’bu