Tuvo faz la consecuencia,
en pasado acontecido,
es razón vierte gemido,
mostrando la diferencia
habida, entre esa sapiencia
absuelta de necedad
y la irresponsable edad,
cual actua desentendida
y pone sangre en la herida,
negando dicha obviedad.
Desprovisto de conciencia,
me olvido de la destreza,
que se encuentra en la simpleza,
de morder con la paciencia,
la salud y complacencia
inmersa en el tiempo unido;
pues allí, el reloj es fornido
y está el futuro vigente
al danzar con el presente,
siendo un abril bienvenido.
Aunque el mío ofrecer fuera
cabal o fruto instintivo,
es parte de un cognitivo,
que queda cerca; a la espera,
para bordar la quimera
bajo una oxidada rueda
o con luz sin humareda,
lanzando la justa respuesta
en el matiz de su orquesta;
fundida por la vereda.
318-omu G.S.