El sol se oculto tras las montañas,
una brisa gélida acariciaba las tibias yemas de los árboles,
si, ese calor que dejaba un sol agotado,
antes de decidir dormir su rostro de trigo
tras esas señoras de faldas largas...
Buenas noches hija de luna,
hay en tus senos dos estrellas
que parecen perdidas en la noche,
buscando un amor, buscando calor...
¿Será por eso que tiritan las estrellas?