Alcanzar la orilla opuesta,
navegar contra corriente
mirar al sol cara a cara
y no dejar de quererte
son los signos que han marcado
mi ilusión en el presente.
Comenzar un nuevo día,
respondiendo a la mañana,
con la luz de mi alegría,
que me brota desde el alma,
vivir mi vida sencilla
como un canto a la esperanza,
escribiendo poesías,
a veces hechas con magia,
y pasear por la orilla
de mi río en paz y en calma
son las tareas diarias
que me ocupan y me agradan.
El poder hablar contigo
y sentirte en la distancia
saber que yo soy el mismo,
notar que tú me acompañas,
vivir la vida con ritmo,
que nuestros deseos marcan
constituyen todo un rito
en el altar de mi alma.
Yo sé que ya no estoy solo
y que el tiempo no se para,
que caminar poco a poco
es la ruta más cercana
de compartir lo que somos
al compás de nuestra ansias.