Salvajes
instintos
olvidados.
El revoloteo
de murcielagos
en el pecho
nuestros apetitos
se encontraron
en un beso
lento y profundo
pude oler
tus caricias
y sentir tus labios de carmin
con tus miradas
me senti como adolesente
que se estremese
por el primer amor.
la caminata
por los viveros
el olor tan fresco
y los niños jugando
mientras
nosostros explorabamos los relieves
de nuestra anatomia
en blanco
y fuimos dibujando
un sueño
tu dibujaste
los tatuajes de mis versos
entre el rocio de tus besos
tan claros.
Nos convertimos
en dos serpientes
que se intentan devorar
con tus ojos cerrados
y tus sonidos tan bajos
y tus caderas tan suaves...
Ahora que lo recuerdo
siento como se expande
el deseo
como necesito tu compañia
como imagino tu sonrisa
espero volver a sentir tus labios
tan cerca
y escuchar tus palabras
de fresa.
saboreo...