¡No juegues más!
No quiero mirar atrás,
no soy gato ni tu ratón.
Dime que me prometerás,
dejar en paz mi corazón.
No es juego la vida,
es un mar de sentimientos,
que andan a la deriva,
llevándose sufrimientos.
Recuerda que el amor,
siempre es importante;
si dudas oye el clamor,
de tu razón acertante.
Fher.
(Todos los derechos reservados por el autor)