Socorro Maria Lopes

Los Estatutos del Hombre


Thiago de Mello


Artículo 1

Queda decretado

que ahora vale la vida,
que ahora vale la verdad,
y que de manos dadas
trabajaremos todos

por la vida verdadera.


Artículo 2

Queda decretado

que todos los días de la semana,
inclusive los martes

más grises, tienen derecho

a convertirse en mañanas

de domingo.


Artículo 3

Queda decretado que,

a partir de este instante,
habrá girasoles en todas las ventanas,
que los girasoles tendrán derecho
a abrirse dentro de la sombra;
y que las ventanas deben permanecer

el día entero abiertas para el verde

donde crece la esperanza.


Artículo 4

Queda decretado que el hombre
no precisará nunca más
dudar del hombre.
Que el hombre confiará en el hombre
como la palmera confía en el viento,
como el viento confía en el aire,
como el aire confía en el campo azul

del cielo.

El hombre confiará en el hombre
como un niño confía en otro niño.


Artículo 5

Queda decretado que los hombres
están libres del yugo de la mentira.
Nunca más será preciso usar
la coraza del silencio
ni la armadura de las palabras.
El hombre se sentará a la mesa
con la mirada limpia,
porque la verdad pasará a ser servida
antes del postre.


Artículo 6

Queda establecida,

durante diez siglos,
la práctica soñada por el profeta Isaías,
y el lobo y el cordero pastarán juntos
y la comida de ambos

tendrá el mismo gusto a aurora.


Artículo 7

Por decreto irrevocable
queda establecido el reinado permanente
de la justicia y de la claridad.
Y la alegría será una bandera generosa
para siempre enarbolada
en el alma del pueblo.


Artículo 8

Queda decretado

que el mayor dolor
siempre fue y será siempre
no poder dar amor

a quien se ama,
sabiendo que es el agua
quien da a la planta

el milagro de la flor.


Artículo 9

Queda permitido

que el pan de cada día
tenga en el hombre

la señal de su sudor.
Pero que sobre todo

tenga siempre
el caliente sabor

de la ternura.


Artículo 10

Queda permitido

a cualquier persona,
a cualquier hora de la vida,
el uso del traje blanco.


Artículo 11

Queda decretado,

por definición,
que el hombre

es un animal que ama,
y que por eso es bello,
mucho más bello

que la estrella de la mañana.


Artículo 12

Decrétase que nada

estará obligado ni prohibido.
Todo será permitido,

incluso jugar con los rinocerontes

y caminar por las tardes

con una inmensa begonia en la solapa.



Sólo una cosa queda prohibida:

amar sin amor.


Artículo 13

Queda decretado que el dinero

no podrá nunca más comprar el sol

de las mañanas venideras.

Expulsado del gran bául del miedo,

el dinero se transformará

en una espada fraternal

para defender el derecho de cantar

en la fiesta del día que llegó.

.


Artículo final

Queda prohibido

el uso de la palabra libertad,

la cual será suprimida de los diccionarios

y del pantano engañoso de las bocas.

A partir de este instante

la libertad será algo vivo y transparente,

como um fuego o un río,

o como la semilla del trigo

y su morada será siempre

el corazón del hombre.