al abrir los ojos
todo se mostraba diferente
toda la orilla desvordandose por dentro
todo el cielo abriendose paso por mi mente
suspiros transformados en huracanes
latidos en terremotos
lagrimas en diluvios
sonrisas en amaneceres
me sumerjo en las profundidades de mi mismo
me abandono en las corrientes que me mecen
y me pierdo en mi propio laberinto
para amarme sin mesura eternamente