Amanece y el sol toca mi ventana,
el resplandor me indica que un nuevo día ha comenzado,
momento de lidiar con los fantasmas del pasado,
aquellos que se adhieren a mí toda la mañana.
Ya ha pasado el momento de mi descanso,
he abierto los ojos y me invade el presente,
la felicidad sigue siendo algo que no alcanzo,
y el silencio y la soledad aunque este rodeada de un montón de gente,
es un puente seguro hacia el misterio que es para mí la muerte.
Pero sé que, No soy dueña de mi vida, no soy dueña del destino,
solo tengo un cuerpo, solo tengo un aliento,
que quisiera terminarlo, pero no soy quien para hacerlo.
Vivo día a día, uno a la vez, sin poder levantar la mirada al cielo,
la luz lastima la profundidad de mis ojos negros,
cuyo iris se confunde con la inmensidad de mis oscuros deseos.
Ya casi no hay luz en mi mirada,
¿Dónde está lo que sentía? ¿Dónde quedó la Inocente niña?
¿Será que se ha marchado con el pasado que la aturdía?
Ya no está, solo queda un cuerpo nuevo, frió, con un pequeño aliento
que me tendrá que bastar ahora que comienzo desde cero,
una lágrima brota de mis ojos, pero se la ha llevado el viento,
no me queda más que salir de este agujero.
Amanece y amanezco, la vida me lo echa en cara,
RENACER, MADURAR, LEVANTARME DE NUEVO,
me tiemblan las piernas, tengo miedo,
no es tan fácil como romper un huevo!!!
Amanece y la luz me cubre,
Amanezco y el futuro es una cumbre,
me pondré los zapatos y saldré a caminar, a buscar, a encontrar,
lo que pase ya no me importa, la vida está llena de misterios como el mar!!!