Soy delicada y transparente,
hija cristalina de la tristeza,
tu corazón me confía fugazmente
sus penas como fieles compañeras.
Al nacer a la orilla de tus ojos
despido un brillo diamantino,
tu aflicción me libera del todo
y yo sigo mi propio camino.
Como belleza radiante del mar
mi cuerpo navega por tu mejilla,
en su suavidad me dejo llevar
para amarte en una salada caricia.
Sólo quisiera darte consuelo
con mi silencioso roce de cristal,
sentir la cercanía del cielo
al percibir la dulzura del final.
En tus labios llenos de melancolía
mi vida se apaga con tu suspiro,
la felicidad desveló mi agonía
de amarte tanto en un solo respiro.
Ceci Ailín
\"Quisiera ser lágrima,
para nacer en tus ojos,
navegar por tu mejilla
y morir en tus labios.\"