Desde lejos se divisaba la cruz ; que a los cuatro puntos cardinales
Señalaba la montaña la espinosa .Allí sobre las cimientes de la montaña se erigía
La pequeña capilla, sus paredes eran blancas de cal , salpicadas por el barro de las lluvias, su arboleda de pinos las flanqueaba a los lados . tenia una puerta de arco de dos hojas de madera de cedro y los senderos de llegada, en la torrecilla un campanario
el más abierto de los senderos mas bien un camino de tierra permitía la llegada de automotor y mulas ;El otro sendero hacia la parte de atrás casi , un sendero para los sacrificios y promesas … Era una ladera empinada, como una aguja que se levanta al cielo
el reto …era subir por allí antes de que llegaran las chicas del Santa Rosa de Lima
cuando llegue con mis amigos el cansancio me consumía, no habíamos desayunado y solo quería una cosa verla…
Las monjas y las niñas apenas estaban arribando …Y allí estaba ella la hija del sol
Pura , radiante mirada, brillante cabellera, después de un rato de sana diversión, se separa del grupo sus compañeras ayudaron , en un recodo cubierto de las miradas de las inquisidoras protectoras …nos encontramos, temblorosos los dos
nos tomamos de la mano y bajamos la cuesta, solo para decir que la quería. Ella en silencio no pulsaba palabra!! En el fondo, quizás? un beso esperaba!!! Pero se arrancaba mi alma si lo hacia.. Un solo vistazo de sus cancerberas, La mandarían al exilio
Solo me importaba verla, con eso me nutria, con eso soñaba, deliraba imaginando nuestras vidas… Valió la pena el sacrificio ,subir la espinosa solo para verla a ella..
Y cuando me acercaba a su rostro , sintiendo su aliento de fresa
Cuando ya el corazón parecía romper el pecho
Se oye la voz del llamado
Aprisa subimos para que no faltara al conteo
De lejos a distancia entre los arbustos miraba
Ella en la fila de reojo observaba
Nada más… hasta lo ultimo, me quede allí,
el autobús se marchaba
veía su silueta en la ventanilla
quedaba su perfume, su esencia, su presencia…
Baje la cuesta entristecido
Atesoraba en mi corazón el encuentro.
Leon Roch
Abril 2011