Meditando sobre la vida,
sobre mi vida junto a ti,
he llegado a la conclusión
de que sí daría todo por ti.
Cuando estoy contigo
río, lloro...pero te quiero;
desde nuestros más bellos momentos
hasta los más terribles tormentos.
Veo en tus ojos la paz,
que tanto anhelaba mi corazón,
cada minuto que no estás
me provoca angustia y desesperación.
Cuando estoy contigo
río, lloro...pero te quiero;
desde aquella primera mirada
sentí que serías el hombre de mis sueños.
Tus palabras y cariño
fortalecen mis ya grandes alas,
estoy lista para emprender el vuelo
hacia el cielo y fusión de nuestras almas.
Cuando estoy contigo
río, lloro...pero te quiero,
tanto que deseo ver por siempre el alba
cobijada en tus brazos y en silencio.
Mi existencia vivir deseo a tu lado,
regalarte cada parte de mi ser
olvidando toda herida del pasado
para así un maravilloso futuro conocer.
Cuando estoy contigo
río, lloro, sueño y entristezco...
!Más aún así te amo sin remordimiento!
bello ha sido el camino andado
aunque duro es y seguirá siendo...