Andrés Mª

EL DILUVIO DESEADO

Cómo empujan las nubes las montañas

y pagan su sudor al intentarlo,

mojando las veredas y los bosques,

que en su esfuerzo van atravesando.

Y llegan hasta mí perfumes húmedos,

de maderas tiernas y verdes prados,

donde se acuesta el sol en arcoíris,

anunciando el evento que ha acabado.

Brilla el sol, recogiendo los sudores

por las nubes vencidas derramados

y convierte en color esos momentos

con pinceles de amor, pintando cuadros.

Ahora es la paz que embriaga los ambientes

y derrama sus efluvios soñados,

que pudieron llegar y no llegaron.

Construiré un arca con mi sueño,

esperando el diluvio deseado

y guardaré en ella mis pensamientos,

mis recuerdos, mi olvido, mi pasado

y cuando abra la puerta a un nuevo día

sabré por fin si lo he soñado.