MADRE, HOY Y SIEMPRE
Todos mis amores, se dispersan, cuál perfúmenos
Las flores de mis rosales, de sus pétalos se deshojan
El viento, se lleva las fragancias de mis aromas
Solo me quedas tú, madrecita de mi alma
De tus besos y caricias, que en vida por ti aclamo
Madre dulce y tierna, refugio de mis plegarias
De corazón, te entrego mis versos y poesías
Es por ti, mi inspiración, que irradias alegrías
Sonría madre querida, que tu risa, dan ganas de vivir todo el día
Madre de preciosa belleza, por ti adorada
Con tu mirada, ilumina mi camino en la alborada
Con tu sola presencia, das respiro a mi corazón
Siempre en mis labores, pediré de ti, la bendición
Madre, eres la flor de mi jardín, la más hermosa
La rosa de mis rosales, la más preciosa
Llevo en mi alma, tu semilla que germina en mi corazón
Que prolongas la vida, sin contemplación, llenándola de razón
Madre, eres para tus hijos a cabalidad, toda una matrona
De esas que con sus valores, todo el mundo añora
Me siento orgulloso de ti, mis triunfos te quiero ofrendar
Y con todos los deseos de mi alma, gustoso te quiero abrazar
Mamita querida, los tiempos pasan, se ves vigorosa y fuerte
De su obra infinita, por Dios terminada
Que sigas rodeada de familia unida, al Señor de los Cielos encomendada
Para que las sigas cuidando, de amor infinito rodeada
Oye, mamita preciosa, siempre estaré de tus consejos pendiente
Y eternamente, darte las gracias, sonría madre consentida
Que todos aquí reunidos, te festejamos con alegría
Por habernos dado la vida, ¡Qué viva mi madre querida!
“Joreman” Jorge Enrique Mantilla –Mayo-2011 Bucaramanga