Las hojas caen
bailando en sus cuatro estaciones:
llega el otoño, viene el verano, canta el invierno unido a la primavera
Los días pasan, y la tierra llora
el sol despierta por el este
y navega por el oeste
en cualquier selva del mudo
resucitando una ecología sonámbula
qué encienden su mirada desde el hoyo perecedor
Palomas mensajeras con aleteo de grandes recorridos
dejando sombras marcadas en letras
de nubes blanquesinas lanzando
poemas de amor
Las montañas gritan aullidos de dolor
por su aberrante extinción a la naturaleza
implorando a Dios una lluvia como proeza
para no morir en soledad
son ellos hombres roedores, miserables
guardados en inundicia y que corroen
su alma maldita al infierno
en la profundidad de oscuras sepulturas
y Así canta Pablo Neruda
"Podrán cortar las flores , pero no podrán cortar la primavera"