Es un llanto!
si, un llanto,
un infante nacido,
y viene alegrar
un hogar donde es deseado,
o un hogar donde está de más.
El tiempo de prisa va,
de infante a niño ha pasado ya;
unos viven entre riquezas y juegos
mientras otros trabajan para comer el pan.
Mira! es un joven atento y bien formado,
mira aquel! que del camino se ha descarrilado,
ayuda nos pide de una mano amiga,
no lo abandonemos y demos un poquito
de aquel sentimiento que es algo divino.
Mas responsabilidad llega a esta edad,
en la que a muchos les toca la vida cambiar;
la vida de soledad , o formar un hogar,y
con la esperanza siempre debes de contar,
porque eres un adulto y debes de triunfar.
El tiempo pasó y llegó la vejez,
su piel arrugada y cansado sus pies;
sus ojos humedos con miradas tristes,
añorando recuerdos que en su mente viven,
alegremos sus dias en estas horas tensas,
porque ellos ya han formado a su descendencia.