Albin Lainez

huéspedes

 

 

Durante estas largas noches,

cuando en soledad me debato,

convoco hadas, brujos, duendes fugaces,

para charlar sobre cuestiones que apremian

y algunos disparates.

Como oportunidad

concibo las horas en duermevela

para liberar a todo el circo

que albergo bajo tinglado de piel

Ellos concurren con alborozo y mágicas frases,

se cuelan por los dedos

hacia cualquier página que sobre.

Allí inventan poemas,

historias o delirios,

temas imposibles de tratar

dentro de la yerma abulia

que domina la superficie.

Esas apariciones grotescas,

a veces cómicas, otras absurdamente iracundas,

logran comprimir el tiempo

facilitando el desquicio en su anfitrión.

Si no se puede dormir,

al menos logro soñar con ojos abiertos.

Derramando en letra

los relatos que hilvanan los huéspedes del adentro

desde firmamentos que nadie contempla.