Sergio Jacobo "el poeta irreverente"

A…tus pies Albita.

 

 

La luz que de tus pies sube a tu cabellera,
la turgencia que envuelve tu forma delicada,
no es de nácar marino, nunca de plata fría:
eres de pan, de pan amado por el fuego.

       Pablo  Neruda

 

 

 

Es una vicisitud escribirle a tus pies

que sostienen tus piernas y tu cuerpo

(que pequeño momento es decir lo que pienso)

Porque tus pies son alma y aliento…,

 

el viento se pasea como una sombra

iluso, transparente, soñoliento,

descansa sobre tus rodillas y tu sexo

¡este viento tenaz! Que sólo es viento.

 

Podría ser la añoranza que me invade

¡cuándo escribo a tus pies! Que no son míos

o el simple hecho de oprimirme lento

al mirar la belleza de tus piernas

-y apaciguar mi sed con sólo verlas-

 

Yo no sé si es ofensa el explayarme

(pero quiero pecar) aunque no pueda

…¡y morder desde el muslo hasta tus pies

arrancando el deseo que esta a mi vera…!