Diletante

LLEGAS TARDE

 

Llegas tarde, más tarde que temprano,

mi reloj del amor dará las nueve;

mientras que fuera se hace obscuro, llueve,

llegas tarde a tocar mi puerta en vano.

 

 

Llegas tarde de un páramo lejano

a do irá ya jamás quien más se atreve

a no volver quien de verdad se embebe

en no dar vuelta con su miedo a mano.

 

 

Llegas tarde hoy. Ayer busqué cercano

contigo estar, en unidad; se debe

decir que fui a tus ojos un fulano,

 

 

nada más; eso sí que hoy que te mueve

triste dolor, se me salió lo arcano

en no atender aunque tu voz se eleve.