Luis Rayo

EL CANTO DE LAS AVES

 

 Soy el ruiseñor que llora

con el canto de las aves,

con el murmullo que añora

aquellos momentos suaves.

Tiempos que alzaron su vuelo

en soledad y flaqueza,

los que partieron sin prisa

y levantaron mi anhelo.

Rotas esperanzas mías

de que los tiempos regresen.

Cuando se vive funesto

no hay asomo de alegrías.

Cuando se siente la ausencia

surge el vacío del verso,

es el silencio el que calla

en el alma la tristeza

y en el trinar su crudeza.