David Goya

MADRE MIA

MADRE MIA:

 

Eres flor de margarita,

con la gracia y el encanto;

de no estar marchita,

después de un largo quebranto.

 

MADRE MIA:

 

Eres bello y radiante lucero,

que a pesar de un gran fracaso;

nunca tuviste pasos ligeros,

bajo la tentación, del pérfido mundo con sus lazos.

 

 

 

MADRE MIA:

 

Dulce fuente de cristal,

vertiente de largos amores,

corrige mis pasos, cuando van al mal;

y consuélame en mis dolores.

 

MADRE MIA:

 

Pedazo del corazón,

nunca has querido verme sufrir;

son tus palabras la pura razón,

que tu le brindas a mi existir.

 

MADRE MIA:

 

Dulce fuente de inspiración,

solo acierto a hacer poesía

al no poder hacer canción,

todo lo que mis manos escribiría.