La fragancia de tu cariño,
la fragancia de tus palabras,
se grabaron en mi corazòn,
querida madre.
Hace tiempo partiste
al cielo tan anhelado ,
muchos recuerdos me rodean,
momentos bien añorados.
La dulzura de tu persona,
el tono de tu voz,
me cautivaron ,
un caudal de afecto incomparable.
En este dìa especial,
madre mìa,
te regalo una rosa
como signo de amor,
una señal preciosa,
que puede aliviar el dolor.
Siempre viviras en mi corazòn,
quizas algùn dìa nos encontraremos,
en un jardìn eterno donde florece la alegrìa,
las rosas reparten su dulce aroma,
y las personas gozan de una perfecta armonìa.