Hoy quiero decirte que te amo,
Hoy grito mi verdad, a los cuatro vientos; manifiesto lo aprendido.
Hoy quiero transmitir mi gran felicidad,
La alegría que siente mi corazón.
Hoy afirmo, lo feliz que me siento,
En efecto, agradezco tu dulce y cálido gran amor.
Ni con todo el amor que siento por ti,
Podría demostrar la nobleza que me enseño tú amor.
Mi corazón, andaba anhelando un amor como el tuyo.
Agraciada me siento al saber que tú me amaste y hoy afirmas tú amor, hacia a mí.
Tú entrega, me inspira a tener fe, a sonreírle a la vida cada día al despertar.
Pues tú amor, me enseñó a perdonar, a dejar de lado la maldad.
Me enseñó a amar, y reflejar la belleza espiritual, que me enseñas día tras día.
En toda su magnitud, me siento rodea de tú amor,
Solo tú podrías darme esa seguridad que me hacía falta.
Definitivamente, cada día que transcurre aprehendo algo de ti.
Me enseñas a regalar una sonrisa, pese a la adversidad.
Es así, que tú grandeza, tú belleza espiritual me refleja el amor puro y sencillamente humano.
Un amor de inocencia pura, llena de confianza hacía ti,
Tu esencia, tu energía de luz hoy iluminará mi camino.
Y hoy, con toda mi humildad, te pido que estés todos los días conmigo,
Al despertar, al intercambiar palabras en el día,
Y claro al volver a casa, buscando un poquito de descanso.
Hoy confió en que serás mi guía, desde antes de nacer.
Hoy no me desprenderé de ti, más buscaré siempre tú consuelo.
Buscaré siempre tú calidez, tú gran amor que cautivó mi ser.
Tú amor, me da vida para seguir y levantarme con una actitud positiva.
Tu amor, me da fuerza para sonreír cada día.