Santiago

Cómo empecé a amarte

Un día,

mientras escribía un cuento de aventura,

pensé en ti,

y sin darme cuenta, entre la inercia,  escribí un poema de amor para tí.

Un día,

 mientras lloraba por un castigo de mis padres,

en ese instante me invadió tu recuerdo ,

y lloré por tu ausencia sin motivo alguno.

Un día,

mientras corría sobre un campo de juego,

me invadió el deseo de abrazarte,

y de repente sentí que corría sobre un campo plagado de flores hacia tí.

Un día,

cuando contemplaba las nubes buscando figuras en ellas,

se formó tu semblante en flor blanco de tu cara.


Un día,

al mirarte,

noté que mi corazón sentía ganas de escaparse,

y al tú sonreirme oí tu risa y no dejó de darme vueltas en la cabeza,

y desveló mis sueños.

Entonces empecé a dar vueltas en mi cama.

Fue ahí cuando me dí cuenta que te amaba

  

  

Y por eso

esa misma noche,

me asomé a contemplar la luna y

decidí pedir un deseo,

el cual aún no me lo concede.

Ese deseo que tanto anhelo,

es tenerte siempre a mi lado.