MAQUINA DEL TIEMPO
Me basta con cerrar los ojos
para dejar el presente ahora,
recordar las penas y los abrojos
el mañana que el ayer ya llora.
I
Estoy de pie, en la cocina,
miro a mamá reír porque el agua
del café hirvió y se derramó por la
estufa; encima de la mesa de piedra
están los nueve platos de comida que
siempre sirve a esta hora. Mesa suavemente
sus cabellos canos y me insta a que vaya a
terminar de lavar el patio de la casa. Allí está
mi hermano menor, aún niño, como yo y jugamos
con el agua y el jabón mientras más allá en el corredor
los demás preparan la noche de navidad.
Hoy no hay nadie.
II
La oveja chispita llama en la distancia
mientras el ladrido de los perros azuza
el gato de la vecina, mi esposa me abraza en el
chinchorro cuando mis hijos juegan alegres en el
cuarto; El ruido que hacen las hojas de las matas de
plátano se confunde con el susurro que hacen los loros
alegres por la breve llovizna que los cubre. Vamos a preparar
la noche de navidad. Estoy feliz.
III
Se me averió la máquina del tiempo
me falta combustible para que siga funcionando,
sólo espero que todos estén en casa. Tengo miedo de
la soledad.
Guivel