Impaciente me acerque a sus ramas,
y al contemplar sus yemas tiernas
y al no ver aun aquella flor soñada,
me vino a mí un sentimiento profundo,
aplaque mi ansiedad y medite hacia mis adentros
existenciales....., y dije volveré a la
mañana siguiente, y aun serás un pequeño
capullo de esa mi flor soñada, más mi deseo de
contemplarla por primera vez llego, fue una
mañana esperada, al fin la pude observar...!
La encontré bañada por el rocío eterno…….!
en sus tiernos pétalos se posaban unas inquietas
gotas cristalinas y luego exclame… !ya eres mía!..
por siempre mía!... eternamente mía...!,
serás mi primera flor de esta mañana primaveral
en mi huerto de Murcia....!
Perdóname eso también se lo dije a las primeras
flores de mi rosal, que también son hermosas como tú...!
Por siempre bellas..!
Oswaldo Guamán Romero
(Poeta emergente)