…
Cuando mis pensamientos,
Queden ciegos de ti.
Los poros de mi piel,
Se abrirán a la noche.
Y los aromos sentirán,
Nostalgia de tu morada.
Y en las noche sin luna,
Caerá la mascara del infinito.
Y yo sonriente te pediré entrar,
Con un ramo de rosas.
Y tú llamaras a las ninfas,
Esas que nos miraban relucir el alma.
Las que no tenían miedo al combate,
De mis manos apresadas.
Las que vivían pendiente,
De nuestros prolongados suspiros.
Y cuando me vaya, caeré en llanto,
De alegrías mundanas.
Con un corazón prestado,
Semidesnudo, agotado.
Con los ojos cerrados,
Pero siempre despiertos de ti…
/derechor de autor reservados) MARTA SILVA